1. El análisis estratégico situacional como técnica y su contexto.

El análisis estratégico situacional y los planteamientos de planificación estratégica para impulsar a las organizaciones en ambientes cargados de incertidumbre suelen ocupar siempre espacios en la formación de los directivos en el sector público y en el privado (el empresarial de negocios y el de las organizaciones). Algunos de sus enfoques y herramientas suelen ser bastante conocidos y en este documento se abordarán conceptos elementales que, quizá, pueden parecer una aproximación algo “burda” para los profesionales que tienen un contacto más habitual con sus técnicas, especialmente aquellos que hayan trabajado intentando resolver problemas sociales en espacios comunitarios o desde plataformas institucionales orientadas a la gestión pública (gobierno).

Sin embargo, el propósito de esta lección se concentra en justificar una aproximación como marco metodológico, por lo que trata de homogeneizar conceptos de base, para evitar su discusión en momentos en los que se requiera concentrar los esfuerzos y el aprendizaje en otros aspectos que se construyen a partir de estas bases. El autor ruega la paciencia e indulgencia de los lectores para el seguimiento de este primer capítulo si manejan con soltura esta metodología.

Los diagramas de Ventt suelen ser útiles para reflejar interacciones entre actores, tanto a nivel bilateral como multilateral. Por ejemplo, reflejan con claridad el área cultural y de intereses compartidos entre actores (espacio de convergencia).
El espacio de convergencia es un concepto importante para comprender la interacción estratégica y algunas de sus ideas asociadas, como consenso o complejidad.

El análisis estratégico situacional (AES) reúne métodos y herramientas para procesar y reducir incertidumbre, desde la perspectiva de un actor/decisor –más adelante se precisa este término que, de otro modo, genera múltiples interpretaciones, no siempre compatibles con el planteamiento metodológico que se utilizará en este curso– que tiene la ambición de actuar sobre una realidad situacional que desea transformar. La necesidad de adelantar acciones, es decir operaciones, programas, proyectos y otras formas de actividad, para alcanzar sus objetivos y la dificultad para que la relación acción-logro dependa únicamente de sus propios recursos de poder, son las características principales que imponen interactuar con los otros actores involucrados. Estos actores involucrados, como se plantea más adelante, se convierten en las fuentes principales de incertidumbre para cualquier actor.

Este curso ofrece una introducción a técnicas que las sociedades humanas vienen aplicando desde su desenvolvimiento cooperativo y competitivo, por lo que no es extraño identificar conexión biológica con la evolución misma del cerebro y, por ello, algunos autores se refieren a las técnicas de análisis estratégico situacional y a las técnicas de planificación derivadas de esos análisis como parte de un “pensamiento estratégico”, destacando así que el sistema nervioso central humano aplica estas técnicas y lo hace prácticamente desde que tomamos contacto con el mundo.

El diseño de un plan de trabajo para gestionar el futuro a mediano plazo (al que llamaremos plan estratégico) y los mecanismos para hacerle seguimiento y desde sus ideas e iniciativas activar con eficacia las variaciones que permitan su más rápida y eficaz adaptación a las dinámicas del entorno, vendría siendo el reflejo organizacional de este aprendizaje biológico-social, es decir, la contraparte organizacional del pensamiento estratégico. Más allá de los espacios de aplicación (personales y organizacionales) las principales diferencias técnicas y analíticas vienen dadas por los sistemas de soporte para lleva adelante este trabajo de procesamiento frente al entorno. Por un lado, los humanos disponemos de un cerebro muy poderoso que nos recrea el control sobre las condiciones de nuestra vida, estimulándonos a reducir incertidumbre, a procurarnos medios para establecernos, sobrevivir, reproducirnos y ayudar a nuestro grupo social a establecerse y sobrevivir también, porque de este modo contribuimos a la sobrevivencia de nuestros hijos.

Mientras, desde el desenvolvimiento organizacional, el objetivo biológico principal ha sido complejizado a través de las estructuras sociales y el desenvolvimiento de los actores. Si quiero que una organización en la que trabajo tenga mejores capacidades de análisis estratégico situacional, debo activar y practicar dispositivos, organizar equipos de trabajo (gente) con ciertas tecnologías y promover aprendizajes compartidos en torno a la información que recibimos en el sistema[1] aunque para efectos de presentación se han diferenciado aspectos conceptuales y analíticos previos del proceso y en la segunda parte de este curso se ofrecen orientaciones para promover la direccionalidad estratégica a partir del plan.

Todo esto como resumen de las tareas para la puesta en marcha de los elementos que permiten proyectarse hacia el futuro e incidir más eficazmente sobre su realidad. Es decir, detrás de estas herramientas se puede asumir la ambición general de ofrecer a los representantes de las organizaciones que se involucren con el estudio de estos materiales, guías que mejoren su capacidad de generar incidencia sobre otros actores y, más en general, incidencia sobre el espacio público y los intereses comunes de la sociedad en la que interactúan.

Aunque todos los planteamientos se harán a nivel introductorio, se espera simultáneamente que tengan un propósito práctico y, de este modo, el curso propone ejemplos, ejercicios y cuestionarios de autoevaluación.

En la mayoría de los cursos de planificación estratégica el plan ocupa el espacio de preponderancia técnica y éste no es la excepción. Sin embargo, su planteamiento pretende superar algunas limitantes del enfoque plan-guía para asumir más un enfoque de plan como conjunto orientador de posibilidades, en el que la guía viene dada por dispositivos de un sistema de dirección estratégica al servicio de líderes y equipos directivos. También quiere superar el planteamiento secuencial de problemas (y sus causas), objetivos, incertidumbre y operaciones para centrarse desde un principio en las interacciones entre actores y, de este modo, facilitar la asimilación metodológica desde cualquier estatus en el que se comience su abordaje.

En tiempos de grandes avances tecnológicos sobre el procesamiento de datos, con retos mayúsculos de índole ética y política para asimilar la evolución de la inteligencia artificial, cada vez más próxima a simular o incluso mejorar los procesos que nuestra base biológica desarrolló como destreza en nosotros durante millones de años de evolución, cuesta evitar un planteamiento sobre la importancia de las técnicas de análisis estratégico en términos de nuestra construcción social común. Este material de estudio parte de una propuesta básica en la que las sociedades humanas se deben a sí mismas, a su proyección como grupo en torno a lo común, a lo público. Además, se ve este compromiso social integrador como un compromiso más amplio con la vida, con lo que somos en términos de la Naturaleza y con lo que nos debemos a nosotros mismos en términos de protección y respeto por las condiciones naturales del planeta, de sus océanos y ríos, de su atmósfera y sus tierras, de los otros seres vivos que coincidieron con nosotros aquí y de lo que podamos comprender en términos de integración con el entorno más allá de nuestra Tierra.

Ojalá el material sea útil al que lo lea, lo aplique y lo necesite. Ojalá contribuya a mejorar la influencia de organizaciones interesadas en el propósito de lo común. Ojalá contribuya a fortalecer espacios de acción en los que se salvan, reactivan y recrean personas antes amenazadas, limitadas o excluidas. Ojalá nos ayude a todos a mejorar.


[1] La idea de sistema y el resto de categorías (conceptos) esenciales en este planteamiento metodológico y el tipo de uso que se le da en este curso están incluidos en un glosario anexo. No es mala idea leerlo un par de veces antes de continuar y consultarlo en busca de algunas de las categorías que este curso asume como medulares: actor-situación, problemas, objetivos, operaciones, incertidumbre, estrategia, indicadores, dirección…